viernes, 16 de enero de 2009

Ahora, ¿adónde emigro?


La inmigración ha bajado notoriamente, pero no porque quieran marcharse de España, sino porque en sus países de origen pueden encontrar lo mismo que aquí: problemas para encontrar trabajo y para comer dos veces al día, pero en familia.
La miseria, al principio era una endemia, se convirtió en epidemia, y ahora en pandemia. La miseria no conoce fronteras ni distingue países. Ahora toca emigrar de nuevo. Pero, de retorno, de donde un día salieron con mil ilusiones y esperanzas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario